Dióxido de carbono (CO2)
La aplicación de CO2 al vino tiene distintos efectos dependiendo de la fase de la producción en la que se realice.
Aplicaciones:
- Refrigeración de la vendimia: Sirve para evitar la oxidación y la fermentación prematura e incontrolada.
- Maceración carbónica: Evita la aparición de mohos. Con ella se consiguen vinos más afrutados, ligeros, frescos y de color más estable.
- Gasificación del vino: proceso habitual para corregir el nivel de CO2 que se pierde después de la fermentación con el objetivo de mantener las características organolépticas del vino.
Hielo Seco (Dry Ice): se produce el efecto de la bajada de la temperatura de la uva. Sirve para evitar la oxidación y fermentación incontrolada o prematura de la uva.
